sábado, 3 de agosto de 2019

Myeik: isla de Pahtaw Pahtet

Sábado 3 de agosto de 2019
Desayunamos temprano en el hotel y salimos hacia la agencia de viajes del hotel Grand Jade. Nos ofrecen un paseo por la ciudad en tuk-tuk que nos parece muy caro. 
Optamos por pasear por nuestra cuenta. Visitamos el colorido mercado cerrado donde Emili se prueba y compra un longyi. Con la ayuda del propietario de otra agencia de viajes decidimos cruzar a la isla de enfrente llamada Phaw Pahtet. El trayecto es en una especie de canoa a motor para nosotros solos por 1000 kyats por cabeza (0.60 €).
Desembarcamos en el muelle de un templo llamado Atula Shwethalyaung con un gran buda reclinado (el tercero más grande del país). Parece que están preparando una congregación de monjes, colocando banderas budistas y mesas como para un banquete.
Casi sin pretenderlo subimos a una de las cimas de la isla con unas vistas preciosas sobre Myeik y sobre el archipiélago Mergui.
Nos acercamos dando un buen paseo hacia el embarcadero y descubrimos la amabilidad y simpatía de sus gentes: todo el mundo saludaba y algunos niños nos seguían con mucha curiosidad. Ya en el embarcadero contratamos otra canoa para volver por el mismo precio.
Contentos por el paseo y por el buen tiempo pasamos un rato por el hotel para descansar y asearnos.
Va siendo hora de comer y optamos por el Shwe Mon un típico restaurante birmano con multitud de platos expuestos al público. La comida está buena pero el tiempo vuelve a hacer de las suyas: comienza a diluviar. Esperamos plácidamente a que amaine.
Decidimos emprender la marcha e ir a ver una pagoda que está en una colina. Llueve pero no nos dificulta las vistas preciosas de toda Myeik y la isla de enfrente.
Un grupo de adolescentes estudiantes se acerca a nosotros y nos hablan en inglés de forma muy afectuosa.
Descendemos por una calle muy bonita con casas típicas. Llegamos a una iglesia católica en la que hay un colegio también y nos aborda un estudiante de descendencia china que nos acompaña explicándonos todo lo relacionado con el antepasado chino de Myeik. Se llama Pi Pi.


Con Pi Pi
Nos despedimos de él en el mercado, no sin antes enseñarnos dos exámenes que había hecho, uno en inglés de Física y otro de Economía en birmano.
Compramos fruta y nos vamos al hotel.
Para cenar elegimos la terraza del hotel Grand Jade. Somos los únicos comensales que degustamos sus buenos platos de pescado y calamar y que contemplamos las vistas nocturnas de la ciudad. Sus precios no son exorbitantes (total 15000 KYAT -9 € ) así que nos vamos a acostar felices.
En la madrugada sopla tanto el viento y la lluvia que nos despertamos temiendo que no salga nuestro vuelo a Yangón.



































1 comentario: