Camino de Ye

Martes 30 de julio de 2019

Emili se despierta un poco antes y aprovecha el tiempo para visitar el colorido mercado de Hpa An.
Tras desayunar en el hotel bajamos andando hasta la parada de guaguas a Mawlamyine.  La guagua llega puntual a las 9:00 y llegamos a las 10:40 a la estación de guaguas. No es la estación que va a Ye por lo que tenemos que trasladarnos. Milagrosamente aparece nuestro “tuctuquero” preferido que nos  reconoce y nos lleva a la estación correcta. Estamos muy felices de la casualidad, que nos da alegría y sobre todo, tranquilidad.
La guagua a Ye tiene prevista la salida a las 13:00 con lo que tenemos algo más de dos horas para comprar fruta, pasear,  y ver el ambiente de la estación tomando  una  “cervecita” en uno de sus bares.
Salimos con 20 minutos de retraso, al parecer, porque faltaba por llegar una pasajera.
Durante el camino hacemos una parada para descansar. La lluvia nos acompaña casi todo el camino como la música que elige un joven revisor que nos ameniza con temas tanto nacionales como internacionales (Despacito, La Bamba...). Al llegar a Ye vamos en dos taxi-moto hasta nuestro hotel. El hotel es muy moderno y la habitación tiene un bonito diseño.
Salimos a pasear hacia el lago que ocupa el centro de Ye. Como comienza a diluviar nos refugiamos en un café cerca del templo que ocupa el centro de lago. Al ser una zona “sagrada” no se vende alcohol ni se fuma en los bares de la orilla.
Sigue sin parar de llover por lo que nos enfilamos hacia el bar Dreams en el que se puede cenar, fumar y beber alcohol. Kati lo bautiza como el teleclub de Ye. Resulta  moderno para el país.
Después de unas cuantas cervezas, un pollo muy picante y unos buñuelos de calamar muy ricos, volvemos al hotel aprovechando que ya no llueve.